Marina de Guerra de los siglos XVIII y XIX: Consecuencias de la Revolución Francesa

Toma de La Bastilla

A pesar de la opinión de los marinos españoles, británicos y españoles se aliaron en contra de los franceses. La opinión era contraria porque, Francia y España tarde o temprano,  estaban abocadas a entenderse, y una total o parcial destrucción de la Marina francesa, podría interesar mucho a los ingleses, pero poco a los españoles.
Ya de por si,  la Marina francesa había quedado muy debilitada a causa de la revolución, ya que numerosos mandos fueron ejecutados o debieron emigrar. A pesar de los esfuerzos de Napoleón, la Marina francesa nunca se recuperó.
De 1792 a 1795, perdieron 33 navíos y 31 fragatas, e incluso Tolón fue atrasado, en su recuperación brilló un joven oficial de artillería  llamado Napoleón Bonaparte. Es sorprendente que mientras el ejército, fue ganando confianza en sí mismo, en la Marina ocurrió todo lo contrario.
En lo que se refiere al ejército español, se vio obligado a un esfuerzo colosal para sus medios, en la "Campaña de los Pirineos". En un principio gracias al buen mando del general Ricardos y a la desorganización del ejército enemigo, se hicieron algunos avances. Justo hasta que Ricardos desapareció y los franceses se organizaron.
En cuanto a la Marina, no se construían nuevos buques desde 1798, ni había dinero para innovaciones técnicas, pero si para cambiar tres veces de uniformidad y pasar de 277 a 435 generales en cuatro años.
La Hacienda Real estaba agotada, tras la costosa Guerra de Independencia de los Estados Unidos. Y la preocupación era lo mismo que había preocupado a Ensenada cincuenta años antes: tener que hacer frente a la Royal Navy a la vez que a un potentísimo ejército francés. Todo el mundo sabía que los franceses esperaban el momento idóneo Para, invadir la Península y cambiar el régimen.
Se optó por reforzar el ejército, aunque la medida fue insuficiente. Quedaba así un flojo ejército y una desamparada Marina.

Comentarios

Entradas populares