Francisco Javier de Istúriz Montero. 13º Presidente en 1836, 36º en 1846-1847 y 53º en 1858

Regencia de María Cristina de Borbón (1833-1840), quinto Presidente del Consejo de Ministros desde el 15 de mayo de 1836 al 14 de agosto de 1836.
Década Moderada (1844-1854), reinando Isabel II, cuarto Presidente del Consejo de Ministros desde el 5 de abril de 1846 al 28 de enero de 1847.
Gobiernos de Unión Liberal (1856-1863), reinando Isabel II, cuarto Presidente del Consejo de Ministros desde el 14 de enero de 1858 al 30 de junio de 1858.

    Nacido en Cádiz, el 31 de octubre de 1790. Participó activamente en la resistencia durante la Guerra de la Independencia española. Al volver Fernando VII al trono español, fue parte activa en la preparación de la sublevación de Rafael de Riego en Cabezas de San Juan, del año 1820. Durante el Trienio Liberal (1820-1823), figuró dentro del grupo de los liberales exaltados, junto con Alcalá-Galiano y Flórez Estrada, frente a la política moderada y conservadora que trataban de imponer Argüelles y Martínez de la Rosa.

    En 1823 presidió las Cortes de Sevilla y Cádiz, a raíz de la invasión de Los Cien Mil Hijos de San Luis, votó por la suspensión de Fernando VII en el ejercicio de su autoridad regia. Pero, tras el triunfo de los absolutistas, tuvo que exiliarse en Inglaterra, de donde volvió en 1834, acogiéndose a la amnistía proclamada por la regente María Cristina. Tras la llegada de Mendizábal al poder, en 1835, éste lo nombró presidente del Estamento de Procuradores en las Cortes. Pero, enemistado con Mendizábal hasta el punto de sostener ambos un duelo sin graves consecuencias para los dos, abandonó el cargo.

    Al salir del Gobierno de Mendizábal, Istúriz comenzó a moderar progresivamente su política, censurando con energía la política de desamortización que estaba llevando a cabo Mendizábal. Gracias a esa oposición, al poco tiempo fue nombrado, en mayo de 1836, por la regente María Cristina presidente del Consejo de Ministros y nombrado ministro de Estado, en sustitución de Mendizábal. Istúriz decretó la disolución de las Cortes y convocó nuevas Cortes con el propósito de reformar el Estatuto Real, lo que provocó la respuesta contundente de los progresistas y una revolución social en Madrid (sucesos de La Granja), que hicieron caer el Gobierno de Istúriz y la vuelta a la Constitución liberal de 1812. Istúriz volvió a exiliarse en Inglaterra, pero por poco tiempo, pues se le permitió regresar a condición de que jurase la constitución, cosa a la que no se negó.

    Durante toda la regencia del general Espartero, fue presidente del Congreso, aun siendo enemigo personal del general. A la caída de éste, en 1845, hizo oposición desde el seno moderado a la política de Narváez, quien pretendía modificar la Constitución. Finalmente, sus frutos políticos llegaron en el año 1846, cuando fue nombrado nuevamente presidente del Consejo de Ministros, bajo cuyo mandato se acordaron los matrimonio de Isabel II  y su hermana, además de establecerse una amnistía política general que permitió el regreso a España de los progresistas exiliados. Durante la legislatura de 1857-58 fue designado presidente del Senado. Posteriormente fue embajador y ministro plenipotenciario en varias capitales de Europa, y nuevamente presidente del Consejo, en 1858. Su caída, acaecida en junio de ese mismo año, propició el ascenso y triunfo de la Unión Liberal de O'Donnell. Istúriz se retiró definitivamente de la política en el año 1864, falleciendo en Madrid, el 2 de abril de 1871.

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